7/1/20

Carta abierta a Alberto del futuro

Berlin, Deutschland
Eres caos, eres placer.
Eres excusa y saber.
Eres cómplice y juez.
Eres siempre y tal vez.

Siendo llanto conmueves,
dibujando una sonrisa,
te atreves,
tan solo (,) una brisa.

Un año, un parpadeo,
un viaje, ningún vuelo,
ya ni siquiera un consuelo,
cada noche de desvelo.

Miradas, caricias,
abrazos, salmos,
bailes infieles.

Atrapado entre sentimientos
como años pasados,
el titubeo entre pasos,
un tecleo desenfrenado,
abierto, desnudo, gastado.

Encierras tanto de ti
que si quisieras salir
dejarías al mundo sin gris.
Ya no te engañes y déjate ir,
veniste a hacerlos feliz.

La luna se cierra como cada mes, la oscuridad ganando para después ser derrotada de nuevo. Las aves no cantan pues es invierno, ni siquiera los cuervos responden. Invierno de frío que no termina por definirse, siendo una neblina confundida por lo empañado del vidrio. Invierno de vecinos silenciosos, invierno de guerra, inverno de mierda.

Te escribo porque espero me vivas de nuevo -me leas. Te escribo porque puedo, porque sientes, porque la calefacción sigue engañándote haciéndote creer que afuera está lloviendo, cuando sólo es una burbuja atrapada en el radiador. Te escribo porque dejarás de comer carne, porque crees que es lo mejor para ti y para todos. Te escribo porque seguirás haciendo ejercicio, ya que te cansa y hace que duermas más rápido. Te escribo porque extrañas, te escribo porque creíste amar y; sin embargo, no dejarás de hacerlo. Te escribo.

5/1/20

Find yourself

Berlin, Deutschland
And you find yourself, ripping, peeling, a lime with your teeth. Tearing apart the fibres, removing the exocarp while allowing your hands to squeeze it. The deformed lime cries into your concave plate. The juice is sweet. Incredibly sweet. The three layers were incredibly dissected, juice sacs exploding and flushing your teeth, your palate does not react. Your hands are wet, your nose as well. Your eyes open, they cannot believe what your hands feel. Asymmetrical halves, an empty plate with phantom droplets, a reflected visage, effigy of solitude. The deafening notes of a terrifying scene, murmuring flames turned into obfuscated embers, emanating from around. Our sweetness now dazed by my urge of truth. Bare fact coherently blinking with my synchronized breathing. In the realm of condensed dreams... the lime is my heart.